¿Qué es el Trastorno Delirante?

Según el DSM-IV-TR de los Criterios Diagnósticos, las ideas delirantes están consideradas como: Trastorno Psicótico dentro del cuadro clínico que se conoce como: Esquizofrenia, la cual se presenta a veces de varias maneras. Se divide en varios tipos, subtipos o también llamados: Episodios.

Entre los tipos de trastornos más comunes, están las ideas delirantes, las alucinaciones, el desaliño, el lenguaje desorganizado como las incoherencias, síntomas negativos, trastorno de pensamientos como las distorsiones cognitivas, perceptivas y de interpretación, los problemas afectivos como la abulia y la alogia, que son la falta de respuesta emocional (querer hacer algo y no poder), y (El empobrecimiento del pensamiento y de la cognición), entre otros como: El trastorno del sueño, el trastorno paranoico, el trastorno catatónico, la psicosis y todas sus ramificaciones.

El impacto que causa un episodio de cualquier alteración psicótica, puede darse con desencadenantes o sin ellos, todo depende del estado de ánimo en el que se encuentre la persona en el momento de la crisis, es decir, si el trastorno psicótico fue inducido por sustancias o no, pues algunas alteraciones no aparecen exclusivamente en el transcurso de un delirio y en ese caso puede deberse a una enfermedad médica. Igual ambos podrían ser causantes de estresores.

¿Cómo se manifiestan las ideas delirantes?.

1.- Alucinaciones visuales y auditivas.

2.- Pensamientos irracionales intrusivos.

3.- Trastorno obsesivo compulsivo

4.- Distorsión Cognitiva (error de percepción e interpretación)

5.-Asociación de ideas (Recuerdos, pensamientos, memorias, etc.)

5.- Intoxicación por sustancias o abstinencia de ellas.

6.- Desaliño corporal, trastornos de ansiedad.

7.- Insomnio, vulnerabilidad.

8.- Psicosis, episodios maníacos.

9.- Tendencias suicidas,

10.- Entre otras patologías.

¿Cómo influyen las ideas delirantes en la vida biopsicosocial del individuo?

De varias maneras, pero principalmente en los estados de ánimo cambiantes, pues la inestabilidad emocional del individuo, puede llevarlo desde la depresión, o la irritación hasta la euforia. Mientras está deprimido podría presentar inseguridades, falta de confianza, baja autoestima, falta de energía, fatiga, insomnio o hipersomnia, pérdida o aumento de apetito, dificultades para concentrarse o tomar decisiones, sentimientos de desesperanza o desequilibrio. Estos síntomas pueden causar mucho malestar clinicamente significativo o deterioro social, laboral o de otras áreas importantes de la actividad del individuo.

¿Qué es más recomendable para tratar las ideas delirantes?

Hasta hace pocos años, la salud mental era considerada exclusivamente como "cosa de locos y para los locos". Generalmente era la psiquiatría "moderna" quien se encargaba de "medicar" a los pacientes psicóticos/psicópatas con trastornos esquizoides/paranoides y delirios de toda especie. Hoy en día gracias a la generosidad de la Psicoterapia Humanista, existe un enorme abanico de posibilidades para tratar todo este tipo de patologías, partiendo desde la premisa individual y analizando todas y cada una de sus áreas o zonas de vida, revisando sus fortalezas y debilidades que también son zonas de oportunidad para orientar al paciente y facilitarle su comprensión creadora y que sea él mismo quien desde su centro de gravedad permanente aprenda a tomar sus propias decisiones.

¿Psiquiatría o Psicoterapia?

Salvo en casos de suma gravedad, psiquiatra y psicoterapeuta o psicólogo clínico, sí pudiesen trabajar coordinadamente en casos especiales, ¿Quién dijo que no se pueda hacerlo? o ¿Dónde está escrito que eso esté prohibido? Se trata de ayudar al paciente a sentirse bien, a facilitar su curación, a que alcance su grado máximo de bienestar físico, mental y espiritual. ¡Tú decides!.

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