15 señales de que tu relación tiene futuro

El amor es un ingrediente esencial para cualquier relación de pareja duradera y feliz, pero no es lo único. Mismo cuando amamos mucho a alguien es posible tener algunas dudas si estamos con la persona adecuada

¿No sabes si estás en la relación correcta? Abajo te enseñaremos 15 señales comunes a las relaciones de pareja sanas que te ayudarán a ver si te encuentras en una.

1. Respetan las diferencias de cada uno y las utilizan como ventaja

Ninguna persona es igual a otra y saber respetar la manera de ser de tu pareja, valorando su calidades individuales, es fundamental para la buena convivencia. Parejas inteligentes usan las diferencias de carácter, de gustos y de historia de vida a su favor, como una forma de enriquecer la relación. Entienden que cada uno tiene habilidades distintas, que se complementan, y actúan como un equipo no como adversarios. 

2. Discuten

Cuando no son violentas ni tampoco ocurren a cada día, las discusiones son benéficas para la relación. Argumentar es una señal de que ambos son suficientemente fuertes para expresar sus propias opiniones. Si una pareja no discute nunca es una señal que una de las partes está dejando de lado sus sentimientos, voluntades o no está siendo verdadero sobre lo que realmente quiere y piensa. No es una relación equilibrada y esto puede pasar factura a largo plazo. 

3. Existe compromiso

No hay nada peor que estar en una relación y notar que la otra persona no está comprometida como debería. En una relación que tiene futuro, existe un compromiso verdadero, lo que significa estar unidos durante los desafíos de la vida, luchar juntos para conquistar los sueños en común y apoyar el otro en lo que necesite. 

4. Enseñan sus debilidades

Nadie es perfecto y con el aumento de la convivencia, las parejas empiezan a conocer los defectos del otro. Esto es natural y muy importante para el proceso de maduración de la relación. Sin embargo, si estamos todo el rato intentando pasar una imagen de perfección que no corresponde a lo que realmente somos, nunca será posible construir la confianza. Enseñar nuestras debilidades es una prueba de humildad. Es reconocer que no somos perfectos, que sabemos que el otro también no lo es, pero que ni por esto dejaremos de hacer nuestro mejor para que la relación funcione. 

5. Hablan de sexo

La comunicación efectiva es la base de cualquier relación feliz y no podría ser diferente cuando el tema es sexo. Estar satisfecho en esta área es muy importante para la felicidad general de la pareja. Por esto, hablar de sexo debe ser visto como algo natural y las dos partes deben sentirse cómodas en expresar sus gustos, deseos y fantasias sin temer o tener vergüenza de la reacción del otro. 

6. Se sienten cómodos en los momentos de silencio

En las parejas maduras y confiantes, hablar es tan importante cuanto el silencio. Estar con tu pareja en silencio, solo disfrutando del momento sin tener que decir nada para probar que te encuentras bien, es una valiosa señal que para ustedes estar juntos es tranquilizador y revigorante. 

7. Mantienen la identidad y la individualidad

Si estas con la persona correcta no tendrás que cambiar tu manera de vestirse, tus amigos, tus gustos. Además, podrás seguir teniendo tus propios sueños, aficiones, objetivos personales y no tendrás que sacrificarte por el otro. Somos individuos enteros y la pareja llega para sumar. 

8. Respetan la privacidad de cada uno

Sois un equipo, pero todavía sois dos personas distintas que tienen derecho a que se respete su privacidad. Esto significa que no hay espacio para mirar el móvil del otro o para querer controlar sus redes sociales o lo que hace cuando no está contigo. Las parejas sanas no pierden tiempo se involucrando en este tipo de actitud que no agrega nada.

9. Existe confianza

Sin confianza no hay relación sana. Si no confías, la relación es insostenible porque jamás te sentirás cómodo que tu pareja salga si ti o que pase tiempo con sus amigos. Vas a dudar si un día tiene que trabajar hasta tarde y nunca vas a creer en su palabra. 

10. Aceptan el pasado del otro

Todos tenemos un pasado y muchas veces este pasado incluye gente que ha sido muy importante en nuestras vidas. Demonizar la ex de tu pareja es una señal de inseguridad, de infantilidad y demuestra falta de inteligencia emocional. En las relaciones sanas, se respeta el pasado porque se sabe que presente es lo que realmente importa. 

11. Se apoyan

Cuando realmente amamos, queremos ver esta persona triunfar en sus objetivos personales. Somos el soporte necesario para que siga adelante y no una piedra en su camino. No hay disputas ni celos del éxito del otro. 

12. El esfuerzo es sostenido

Cuando una relación empieza y estamos enamorados es muy natural que las dos partes se involucren para hacer el otro feliz. Sin embargo, con el paso del tiempo este empeño disminuye debido a la falsa sensación que ya hemos ganado el juego. Mantener una relación de pareja sana da trabajo y exige atención constante. El esfuerzo que cada uno deposita en la relación debe ser consistente y igualmente reconocido y apreciado por el otro. 

13. Siempre son abiertos, honestos y directos

Saber comunicarse es importante en todas las esferas de la vida, incluso en las relaciones de pareja. Una comunicación abierta, honesta y sin filtros, en la cual ambas las partes se sienten cómodas para exponer sus puntos de vista sin ser juzgados es fundamental para construir una relación sólida. Para una buena comunicación, es importante acudir por la asertividad, ya que ayuda a expresarnos de manera tranquila y clara, pero también es fundamental saber escuchar. 

14. No evitan los temas difíciles

En algunos momentos es necesario hablar de cuestiones delicadas, como las finanzas, el futuro de la relación, la crianza de los hijos. Al evitar los temas tabús por miedo de la reacción del otro, podemos reprimir sentimientos importantes y causar una falsa sensación de que todo va bien. Además cuando no hablamos de estos temas, no es posible solucionarlos y la relación se estanca.

15. No intentan cambiar el otro

Nadie debe intentar cambiar tu carácter o personalidad, pero buscar incentivar que desarrolles tus puntos fuertes y calidades. Si estás con la persona adecuada, seguro que serás tu mejor versión.

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