¿Qué es la psicología infantil?
La psicología infantil es la rama de la psicología que se dedica al estudio del comportamiento del niño desde el momento de su nacimiento hasta la adolescencia. A través de ella se realiza el diagnóstico y tratamiento de los trastornos mentales en los niños. El eje de la psicología infantil es el niño analizando su desarrollo físico, cognitivo, motor, perceptivo, social y afectivo.
En la psicología infantil el especialista emplea diferentes métodos para prevenir y resolver problemas de salud mental encontrados en el niño.
¿Cuáles son los problemas más frecuentes en los niños?
Los problemas psicológicos más frecuentes en los niños se pueden clasificar en dos grandes grupos:
- Problemas de comportamiento y sociales: dentro de los que encontramos fobias escolares, aislamiento, ansiedad, trastornos depresivos, incontinencia urinaria y anal, agresividad, rebeldía, trastornos adaptativos, trastorno por angustia de separación, trastornos de conducta, Trastornos Del Espectro Autista (TEA), y Síndrome de Gilles de la Tourette.
- Problemas escolares y de aprendizaje: como el déficit de atención (TDAH), la hiperactividad, entre otros.
¿Cuáles son los miedos y fobias más frecuentes en los niños?
Los miedos y fobias más frecuentes en los niños son un asunto que los padres deben tener en cuenta para entender sus inseguridades y ayudar a gestionarlas.
Estos son los miedos y fobias infantiles más comunes:
- Miedo a la oscuridad.
- Pesadillas, miedos nocturnos o miedo al dormir.
- Miedo a los monstruos.
- Miedo a ruidos extraños o de la naturaleza.
- Miedo a los animales.
- Miedo a las personas desconocidas.
¿Cuáles son las etapas del desarrollo infantil?
Las etapas del desarrollo infantil (o periodos) se dividen en 4:
- Etapa sensoriomotora: primer período comprendido desde los 0 hasta los 2 años. Centrado en el niño usando sus sentidos y capacidad motora para conocer lo que le rodea.
- Etapa preoperacional: este segundo período va de los 2 a los 7 años y en él el niño adopta una postura egocéntrica que le impide entender el punto de vista de los demás. En esta etapa también aprende acerca de la conservación (cantidades y formas) y la interacción con su entorno de manera más compleja, a través de las palabras y las imágenes mentales.
- Etapa de las operaciones concretas: tercer periodo que abarca de los 7 a los 12 años. En este punto el niño cuenta con la lógica y principios que lo llevan a conocer las cosas no intuitivamente sino mediante la racionalidad. El niño empieza a entender el punto de vista de otros, así como el concepto de la agrupación, por ejemplo: entienden que un perro grande y uno pequeño siguen siendo parte del mismo grupo (perros).
- Etapa de las operaciones formales: el cuarto período va de los 12 años en adelante. A las puertas de la adolescencia el niño (u adolescente) ya posee pensamientos abstractos, piensa en cómo puede hacer las cosas, y crea hipótesis que van más allá de la realidad. Aquí ya existe un acercamiento a los conceptos de causa y efecto, además de una mejor comprensión del mundo.
¿Cuándo llevar a un niño al psicólogo infantil?
Si te preguntas cuándo llevar a un niño al psicólogo infantil lo primero es indagar si has notado cambios en su comportamiento que no comprendes, o si se queja de manera continua de dolores corporales.
Estos son algunos comportamientos que pueden llamar tu atención y servir de alerta para acudir al psicólogo infantil. A nivel interno (síndromes internalizantes):
- Depresión: el niño se aleja, no tiene ganas de hacer nada, se enoja sin razón, presenta alteraciones del sueño.
- Ansiedad: evidente en un niño agitado, nervioso, con preocupaciones excesivas, problemas al comer, y miedos.
- Retraimiento: el niño se distancia física o psicológicamente de su entorno porque este le representa estrés. Prefiere jugar solo, es cohibido, tímido, se comunica con dificultad.
- Quejas somáticas: las manifestaciones de los problemas psicológicos en los niños pueden expresarse en malestares que interrumpen su cotidianidad. Cuando se presentan continuos dolores de cabeza, de pecho, o malestares gastrointestinales sin una causa orgánica es hora de acudir al psicólogo.
A nivel externo (síndromes externalizantes):
- Conductas agresivas: expresiones verbales, agresiones físicas, tomar por la fuerza objetos, pellizcar y actuar de manera desafiante frente al adulto.
- Comportamientos delincuenciales: consumo de sustancias psicoactivas, agresiones sexuales, o inadaptaciones sociales usualmente más frecuentes al principio o desarrollo de la adolescencia.
Los problemas sociales expresados en comportamientos disfuncionales, del pensamiento -expresados en pensamientos extraños difíciles de controlar-, y los problemas de atención, combinan las manifestaciones internas y externas por lo que también son señales importantes de que debemos acudir a terapia infantil.
Los padres son quienes conocemos mejor a los niños y por eso podemos notar que algo no anda bien y acudir a asesoría psicológica cuando se crea conveniente.
¿Cómo explicarle a un niño que va a ir al psicólogo?
Explicarle a un niño que va a ir al psicólogo depende de su edad.
Si se trata de un niño pequeño es posible decirle en el momento que vamos a ir al psicólogo y que allí podrá dibujar y jugar. Si siente temor por los médicos es útil explicarle que este doctor no aplica inyecciones, sino que va a hablar y jugar con él. Si el niño ya va a la escuela es importante que exista coordinación entre esta, los padres y el terapeuta.
Cuando se trata de niños de entre 6 a 12 años, es importante anticiparles que iremos al psicólogo, comentándoles del tema unos días antes de la consulta. Es importante que los niños no sientan que los llevaron con engaños o manipulaciones.
En niños de 12 años en adelante el diálogo es clave para explicarles anticipadamente los motivos por los que los padres creen conveniente ir al psicólogo. Es importante mostrarles cómo el terapeuta los podrá ayudar (siempre usando lenguaje positivo), y explicarles que lo que hablen con él será confidencial, por lo que solo lo sabrán si el niño lo autoriza. Esta regla no aplica cuando los temas tratados se centran en suicidio y autolesiones.
Aun así, algunas veces los niños no se sentirán cómodos o felices por ir al psicólogo, pero es importante manejar el tema con sinceridad, explicar los motivos de preocupación y comentarle que los padres también harán parte del proceso (no estarán 'solos').
¿Quién te puede ayudar?
Los profesionales indicados para ayudar cuando se tratan problemas psicológicos en niños son precisamente los psicólogos infantiles y los terapeutas especializados. Es imprescindible que los expertos cuenten con formación específica en la rama de la psicología infantil y que idealmente cuenten con experiencia que avale sus conocimientos.
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