Cómo identificar si eres víctima de chantaje emocional

El chantaje emocional es una forma de violencia psicológica que ocurre cuando alguien usa emociones como el miedo y la culpa para manipular el otro y así conseguir lo que quiere.

El término ha sido popularizado por la psicoterapeuta Susan Forward en su libro Chantaje Emocional. A través de estudios de casos, Susan analizó el comportamiento de las víctimas y de las personas que practicaban este tipo de manipulación para que fuera posible detectarla mejor. Según Forward, el chantajista emocional suele:

Demandar: de una forma muy sutil, la persona empieza a hacer algunas demandas. Puede, por ejemplo, pedir para que el otro no vea determinado amigo diciendo que “este no es una buena influencia”. O pedir que cambie una pieza de ropa porque estaría “más guapa/o con otra”, etc. Todos estos intentos de control son hechos de una manera muy sutil y al principio se parecen más con una especie de cuidado, con una preocupación sana con el bienestar del otro, que con un rasgo de alguien controlador.

Presionar: cuando el otro se opone a hacer lo que el chantajista emocional quiere, este empieza a presionarlo de diversas formas. Puede:

• Hacer el pedido de nuevo diciendo, por ejemplo, que “solo estoy pensando en nuestro futuro.
• Explicar cómo tu resistencia afecta sus sentimientos, diciendo cosas como “si me amaras, lo harías”

Criticar explícitamente tu decisión haciendo drama con frases del tipo: “si me dejas, mi vida estará arruinada”.

Amenazar: directa o indirectamente.

• Amenazas directas: “Si sales con tus amigos hoy, no me verás nunca más.”
• Amenazas indirectas: “Si no te quedas conmigo esta noche y no sale con tus amigos, lo pasaremos mucho mejor. Es importante para nuestra relación."

Repetir: el chantajista emocional es muy observador. Cuando el otro cede y satisface sus deseos, él aprende cómo actuar en situaciones similares en el futuro. Incluso sabrá que tipo de chantaje emocional funciona más rápido. Así, este padrón nocivo de control tiende a seguir.

Es importante señalar que el chantaje emocional se da no solo en las relaciones de pareja sino también entre familiares y amigos. Ser chantajeada/o emocionalmente tiene efectos muy negativos en la salud mental. Al actuar en desacuerdo con sus valores y deseos por miedo de no satisfacer el otro, el individuo pasa a no poder tomar sus propias decisiones, dejando de ser independiente. Esto genera muchas pérdidas, entre ellas el abandono de hábitos y el corte del vínculo con otras personas.

Además, este tipo de chantaje agota la víctima emocionalmente, debilitando su autoestima y generando mucha ansiedad.

Somos fácilmente engañados por aquellos a quienes amamos. Molière

Cómo saber si eres víctima de un chantajista emocional

Un chantajista emocional suele ser una persona muy inteligente, observadora y con un enorme poder persuasivo. Sabe reconocer los puntos débiles de las personas con las cuales se relaciona y se aprovecha de esto para conseguir lo que quiere. Por otra parte, a menudo son personas autoritarias, celosas y con baja autoestima, que buscan a través de este tipo de control sentirse seguros y no ser abandonados.

Identificar un chantajista emocional no es fácil porque él sabe cómo hacer para que el otro se sienta culpado. Por esto, el primer paso es reflexionar si te sientes aprisionada/o y obligada/o a actuar de una forma que no crees ser la más adecuada. También debes reflexionar si:

• Has dejado de hablar o convivir con alguien debido a la sugerencia de esta otra persona.
• Has cambiado tus costumbres, gustos o manera de vestirse para complacer esta persona.
• Escuchas con mucha frecuencia frases del tipo: "hago todo por ti y no me valoras", "si me dejas, no respondo por mi vida", "no te preocupes, ya he entendido que todo en mi te molesta".
• La relación con esta persona solo es tranquila cuando tiene todas sus voluntades atendidas. 
• Te sientes cansada/o y sin ilusión. 
• Sientes miedo de la reacción del otro cuando piensas en empezar algo nuevo o cuando quieres expresar tus opiniones.
• Notas que esta persona siempre hace el papel de victima y nunca asume su responsabilidad.
• El otro te penaliza con el silencio cuando algo no sale como lo esperaba.

Cómo acabar con el chantaje emocional

Para romper este ciclo de chantaje emocional es importante que quien la sufre pase a tener una postura totalmente diferente de la que estaba siendo adoptada hasta entonces. Esta es la única forma de protegerse de este tipo de violencia psicológica.

Al identificar el padrón de la chantaje es fundamental no ceder a él. Al inicio, esto generará sufrimiento en ambas las partes, que ya estaban acostumbradas con la otra dinámica. También es importante ser asertiva/o a la hora de exponer tu opinión, voluntades y creencias. Además, sería interesante aprovechar este momento de cambio para retomar actividades y el contacto con gente que te hace bien.

En esta fase, un psicólogo puede ayudarte a delimitar todos estos límites y a decidir si vale o no la pena mantener en tu vida una persona así. 

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