¿Qué es el estrés?
El estrés tiene que ver con una tensión física y emocional. Su origen está relacionado con situaciones que vive la persona como frustraciones, nervios, exceso de trabajo o de obligaciones. El cuerpo suele sufrir una afectación y reacciona de forma desafiante.Ante el estrés cotidiano, nuestro cerebro libera hormonas que nos permiten estar alertas y evitar situaciones de peligro.
En este sentido, el estrés es positivo y natural porque protege a nuestro cuerpo. Sin embargo, cuando el estrés se prolonga por mucho tiempo puede ser dañino porque afecta nuestra esfera biopsicosocial. El 90% de los usuarios de Psico.mx se muestran satisfechos con el tratamiento psicológico en casos de estrés.
¿Cuáles son las causas del estrés?
Las causas del estrés pueden tener diferentes detonantes, depende mucho de las circunstancias y de la persona que lo padezca. Generalmente son:
- Trabajo
- La economía personal
- Relaciones de pareja
- Alguna pérdida significativa
- Embarazo
- Cambio de hábitos
- Falta de sueño
Y aunque el estrés es un proceso natural para dar respuesta efectiva a los acontecimientos y estímulos exteriores, se ha vuelto una de las enfermedades más comunes de este siglo y está asociada al ritmo laboral.
¿Cuáles son los síntomas del estrés?
La forma en la que se manifiesta el estrés tiene que ver con la afectación de las emociones, pensamientos y salud física. Los síntomas pueden variar porque depende mucho de la persona y las circunstancias externas e internas que se estén viviendo; es indispensable estar atentos a los síntomas:
- Agitación
- Agobio
- Dolores de cabeza
- Tensión muscular y emocional
- Insomnio
- Preocupación
- Pensamientos acelerados
- Negatividad
¿Cuáles son los distintos tipos de estrés?
El estrés puede resultar complicado y confuso porque existen diferentes tipos que van desde el agudo y episódico hasta el crónico. Cada uno con características propias que determinan su duración y síntomas. Un psicólogo hará la evaluación para determinar el tipo de estrés y nivel.
- Estrés postraumático: Es un trastorno que se puede padecer después de haber vivido un evento traumático de amplia magnitud como una guerra, un asalto, una violación, abuso físico o accidente. Afecta a quien lo padece al sentir un temor constante y puede causar problemas como poder dificultades para dormir, sentimientos de ira, preocupación y tristeza.
- Estrés laboral: Es un padecimiento que se desarrolla en un entorno laboral con saturación física y mental. Suele afectar a la persona en su entorno familiar y personal, ya que tiene un desequilibrio.
- Estrés positivo: Existe un tipo de estrés que no causa daño a la persona, comúnmente es cuando se está bajo presión y lo lleva a estar más activo y motivado para realizar diversas tareas.
- Estrés agudo: En dosis elevadas este estrés puede ser peligroso, porque agota a la persona tanto mental como físicamente. El día a día en la ciudad genera este tipo de estrés y se manifiesta con dolores musculares, emociones negativas y problemas estomacales.
¿Cuáles son las consecuencias del estrés?
Las consecuencias del estrés están sujetas a la persona que lo padece y la forma en que puede soportarlo, trabajarlo y superarlo. Entre ellas están la ansiedad, el cansancio, el dolor de espalda, el dolor de cabeza, los cambios de humor y la disminución de la autoestima. Afecta el plano fisiológico y psicológico. Puede provocar problemas cardiovasculares, gastrointestinales y musculares; así como miedos, fobias y depresión.
¿Cómo superar el estrés?
Existen métodos que son eficientes para prevenir y superar el estrés. En primera instancia la orientación de un psicólogo es primordial, porque nos permitirá comprender las situaciones que nos generan más estrés y nos enseñará a controlar las emociones en situaciones difíciles.
Para controlar el estrés es fundamental respirar de forma controlada y consciente, analizar la situación y afrontar aquello que nos genera más tensión viéndolo como una oportunidad de desarrollo y crecimiento. En cuanto a las recomendaciones generales para prevenir el estrés, debemos tener en cuenta:
- Hacer ejercicio regularmente: al menos 30 minutos de caminata tres veces a la semana.
- Evitar los conflictos: hay confrontamientos que no aportan mucho y nos generan más angustia que otra cosa. Elegir 'las batallas' es una buena estrategia.
- Relajarse: cada día debemos sacar unos minutos de relajación y disfrutar la compañía de las personas que nos hacen sentir bien.
- Comer bien: aumentar el consumo de frutas, verduras y fibra nos permitirá ir más ligeros.
- Dormir bien: cada uno debe encontrar su propia rutina para ir a la cama y dormir bien.
- Disfrutar el tiempo libre: airearse, buscar sitios diferentes para pasar el tiempo libre, es una buena manera de oxigenarse.
¿Quién puede ayudarte?
La ayuda de un profesional de la salud mental es una opción para quien padece de estrés crónico. El psicólogo evaluará con una entrevista, test y sesiones terapéuticas cuál debe ser el método y herramientas adecuadas para trabajar el estrés. De esta forma el paciente podrá estar consciente de las técnicas que debe aplicar para comprender las situaciones y personas que le generan mayor tensión y cómo debe prepararse de antemano para los eventos estresantes. El apoyo familiar, la organización del tiempo personal y las técnicas de respiración y relajación permiten prevenir con éxito el estrés.
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