¿Qué son los trastornos de la personalidad?

Generalmente, desde niños se nos ha inculcado un concepto equivocado de lo que es la personalidad. Pensamos que cuando un individuo luce radiante, elegante, guapo, con buena apariencia y con mucho porte, es porque tiene mucha personalidad, cuando en realidad de verdad, la misma, constituye un conjunto de agregados psíquicos o características psicológicas, tales como: La forma de ser de una persona, su modo de comportarse, de expresarse, de sentir, de pensar, de aprender, de relacionarse consigo misma y los demás, su forma de ver el mundo, su forma de percibir las cosas y comprender la vida. Tal como lo expresa el Dr. Jorge E. Agüero, Profesor Argentino, de la Cátedra de Psiquiatría.

Sin embargo, el Manual de Estadística, o Criterios diagnósticos generales, conocido como DSM-IV-TR, define a un trastorno de la personalidad como "Un patrón permanente e inflexible de experiencia interna y de comportamiento que se aparta acusadamente de las expectativas de la cultura del sujeto, tiene su inicio en la adolescencia o principio de la edad adulta, es estable a lo largo del tiempo y comporta malestar o perjuicios para el sujeto."

Mientras que la CIE-10 (Clasificación Internacional de las Enfermedades, en su Capitulo V, se refiere a las enfermedades mentales) los define como "Alteraciones y modos de comportamiento que tienen relevancia clínica por sí mismos, que tienden a ser persistentes y son la expresión de un estilo de vida y de la manera característica que el individuo tiene de relacionarse consigo mismo y con los demás. Algunas de estas alteraciones y modos de comportamiento aparecen en estadios precoces del desarrollo del individuo, como resultado tanto de factores constitucionales como de experiencias vividas, mientras que otros se adquieren más tarde a lo largo de la vida."

Este patrón debe manifestarse por lo menos en dos de las siguientes áreas:

• Cognitiva

• Afectiva

• Funcionamiento interpersonal o,

• Control de impulsos.

1.- En cuanto a la parte cognitiva, se refiere al conocimiento. Es decir, se refiere a la cognición del individuo, por ejemplo las formas de percibir e interpretarse a uno mismo, a los demás y a los acontecimientos. Cuando esta área está afectada, son muy elocuentes las distorsiones cognitivas, el individuo todo lo ve y lo siente de forma equivocada, subjetiva y lejos de la realidad.

2.- La afectividad, se refiere a la gama, intensidad, labilidad y adecuación de las respuestas emocionales. Hasta qué punto el individuo es capaz de conocer y controlar sus emociones en su máximo esplendor. ¿O sus emociones lo controlan a él?

3.- La actividad interpersonal, es la forma cómo nos relacionamos con los demás, todo lo que hacemos y cómo nos comunicamos con otras personas, lo que decimos, lo que intercambiamos, lo que pensamos y externamos en grupo, por eso se le llama extrínseca. Son las ideas, pensamientos, sentimientos y emociones que compartimos con los demás.

4.- El control de impulsos. Se refiere a la forma cómo controlamos nuestros impulsos. Este trastorno infiere las actividades de alto riesgo que nos dominan y que no podemos controlar, como por ejemplo: Enojarnos, gritar, agredir, reaccionar así nomás porque sí, sólo por impulso y que no podemos detener. Es la manera intrínseca desordenada de nuestras conductas, de nuestros pensamientos y acciones que nos controlan, que nos manejan y que no podemos controlar, como por ejemplo en algunos casos, el consumo de sustancias, el juego patológico, llamado también ludopatía, los trastornos explosivos como cuando alguien avienta y destruye objetos o actos de mucha violencia, entre otros…

Existen varios tipos de trastornos de la personalidad, que se clasifican por grupos, según su gravedad, por ejemplo: Los del Grupo A, se refiere a los trastornos paranoides, los esquizoides y los trastornos esquizotípicos. Los del Grupo B, son los trastornos antisocial, límite, histriónico y narcisista. Los del Grupo C, se refiere a los trastornos de personalidad por evitación, por dependencia, el trastorno obsesivo-compulsivo y otros trastornos de la personalidad no especificados.

Este tipo de trastornos que son desadaptadores y estresores, tienen su raíz en tres factores a saber: Pueden ser de carácter genético, psicológico, o ambiental, es decir, sociocultural, o todos juntos, según sea el caso.

Claro está que existen también otro tipo de problemas biopsicosociales que pueden ser objeto de atención clínica, ya que afectan sobremanera, no sólo a la salud mental del individuo, sino también a la salud física, pero de eso hablaremos en otra ocasión. Si requieres de mayor información sobre este tema, por favor, no dudes en escribirnos a psico.mx, atenderemos todas tus dudas y sugerencias a la mayor brevedad posible.

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