¡Muévete, sacude tus temores y sé feliz!

El origen de las enfermedades psicosomáticas es la falta de gestión adecuada de nuestras emociones tóxicas y estancadas en la parte más vulnerable de nuestro organismo.¡Solicita información!

25 FEB 2019 · Lectura: min.
¡Muévete, sacude tus temores y sé feliz!

Hoy en día es muy común encontrar personas que se quejan amargamente de todo: Su mala salud, la falta de atención, respeto y comprensión de los demás, de la continua escasez, y hasta de su mala suerte, y lo peor, es que siempre encuentran chivos expiatorios, siempre están culpando de todo a quienes tienen más cerca que es a su propia pareja, o también culpan a los hijos, a los padres, a los hermanos, al jefe, a los vecinos, al destino o culpan a Dios por sus desventuras, pero no quieren entender, o no pueden darse cuenta de que cada uno es quien labra su propio camino y también reside en su propio destino.

En ese marco y desde que el Dr. Sigmund Freud (Padre del Psicoanálisis 1856-1939), mostró al mundo su monumental descubrimiento del inconsciente, y se atrevió a afirmar que lo físico podía estar relacionado con las dimensiones emocionales y mentales del ser humano y a pesar de que fue duramente criticado por tal atrevimiento de su época, ese postulado de antaño ha estado vigente hasta nuestros días, y ha sido mejorado con pruebas irrefutables incluso por uno de sus más fieles discípulos, el Dr. Wilhelm Reich (creador de la vegeto-terapia 1897-1957), precursor de la metafísica, y quien estableció científicamente el vínculo indisoluble entre la psicología y la filosofía, al demostrar que las neurosis no sólo afectan el ambiente mental de las personas, sino también sus cuerpo físicos. Afectan claro que si, a través del fenómeno y efectos de la Somatización.

Más tarde en la línea del tiempo de la psicología, llega el Dr. Alexander Lowen (1910-2008), discípulo del Dr. Reich, para acuñar el término de "Bioenergética", o terapia bioenergética de su propio postulado que consistió en comprobar que cuando existe un desequilibrio entre la razón y el corazón, el cuerpo padece de insuficiencia de energía corporal y más cuando no le damos importancia a las cuestiones de la sexualidad humana. El organismo tiene sus necesidades fisiológicas, la energía corporal debe fluir armoniosamente entre el pensamiento y las actividades genitales, pero cuando hay desequilibrio entre ambas, se generan alteraciones bioquímicas que terminan convirtiéndose en trastornos de somatización, es decir, la energía de las emociones no elaboradas, se transforman en enfermedades, llamadas psicosomáticas.

Qué curioso parece pero aquí podríamos observar lo que sucede en las interacciones muy directas entre dos personas, podrían suceder dos cosas: la primera es que si uno de los dos se enferma, el otro termina también enfermándose, y lo segundo es que, si el primero se porta mal, es al otro al que le tiene que doler la cabeza por ello, ¿Por qué sucede esto?. El Dr. Freud también nos habla sobre el fenómeno de la transferencia y contratransferencia, que no sólo podría ocurrir en las relaciones de pareja sino en las relaciones o interacciones en general, debido a la movilización de sentimientos de uno hacia el otro, causando resistencias al entendimiento y la curación.

El desamor o falta de amor, es el principal causante de enfermedades psicosomáticas. Este sentimiento de vacío y carencia afectiva, va surcando una grieta profunda de dolor emocional en el alma, que puede conllevar a estados depresivos severos: Las personas depresivas se sienten abandonadas, menospreciadas, limitadas, anuladas, incapaces de conseguir lo que desean y terminan enfermas en soledad, por tanta amarga reacción, tienen trastornos de sueño, trastornos alimenticios, trastornos de ansiedad, episodios de mucha necesidad de protección y amparo, se sienten tristes y podrían llorar hasta el cansancio y el consuelo no les llega porque aparte sienten que no merecen nada de nadie, encima se autosabotean.

Sé feliz

Para solucionar ese tipo de trastornos, Alexander Lowen propone la Terapia de Bioenergética, es decir empezar a hacer movimientos de nuestro cuerpo, en el ánimo de que nuestras energías estancadas en las partes más vulnerables de nuestro cuerpo circulen o fluyan de manera rítmica y armónica.

Lowen nos da a conocer tres fases o pasos para movilizar o dejar fluir este tipo de emociones implotadas o sentimientos atorados o no expresados:

1. Hacer consciencia de los problemas emocionales individuales y observar la magnitud y alcance de la tensión muscular corporal que nos invade y nos asfixia.

2. Descargar esas emociones como sea: brincando, saltando, bailando, corriendo, expresando sentimientos y emociones guardadas que nos han llenado de frustraciones y distensión muscular y donde los mecanismos de defensa del Yo, ya no van a seguir siendo un problema.

3. Liberación de la energía asociada a los conflictos emocionales y tener acceso a una vivencia y experiencia corporal y psicológica plena, viva y sana, es decir, revisar nuestros estilos de vida rancios y caducos, modificando por supuesto hábitos, vicios y costumbres milenarias.

No es posible pues, seguir viviendo de la misma manera y funcionando en automático negativo. Tenemos que entender que cada persona es individual y posee sus propios recursos, aún viviendo dentro de una relación de pareja. No es posible despersonificarse por complacer al otro ni estarle aguantando todas sus patanerías ni estarle cumpliendo todos sus caprichos porque nos convertiremos en cómplices gratis de los delitos transgresionales o distorsiones mentales del otro que tiene conductas infantiles y se porta así, como un(a) niño(a) grosero(a), malcriado(a) y consentido(a), que está aún muy lejos de madurar.

¡Ojo!, ponte las pilas, aprende a moverte, has ejercicio al aire libre, aprende a respirar diafragmáticamente, toma mucha agua diariamente, disciplínate combinando bien tus alimentos, respeta tus horas de descanso y sueño, aprende a perdonar las viejas heridas emocionales que ya no tienes por qué seguir cargando en tus alforjas como si fuera un costal de papas, ¿te fijas ahora por qué algunas personas hasta caminan jorobadas? ¡Es la carga emocional que traen sobre su espalda!, no permitas que nada ni nadie te siembre desalientos, no te dejes devastar por tu propio desaliento, pero sobre todo, no dejes que nunca, nada ni nadie te absorba tu energía ni te robe tu paz.

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Escrito por

Dora Lidia Pérez Rochín

La Psic. Dora Lidia Pérez Rochín es una de las psicólogas más profesionales que brinda la atención y orientación necesaria para poder resolver sus problemas emocionales que pueden estar afectando su vida social y familiar. Cuenta con el conocimiento y la experiencia necesaria.

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