La Salud Mental en situaciones de Desastre

Las circunstancias difíciles de la vida o los traumas nos permiten potenciar recursos personales que estaban latentes y que el individuo desconocía hasta el momento. ¿Sabes cómo afrontarlos?

12 MAY 2020 · Lectura: min.
La Salud Mental en situaciones de Desastre

Empezaremos con una pregunta interesante: ¿Qué es la Salud?: Los expertos en la materia opinan:

"La salud es un estado de completo bienestar biológico, psicológico y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades. Está relacionada con la promoción del bienestar, la prevención de trastornos mentales, el tratamiento y rehabilitación de las personas afectadas por dichos trastornos". (OMS, 2015).

En ese marco, la importancia que reviste atender la Salud Mental en situaciones de crisis, contingencias sanitarias y desastres se hace urgente. Es necesario reconocer la magnitud y alcance que reviste el poseer información adecuada, preparación previa, conocimientos básicos para manejar emergencias, y acciones preventivas. Aprender de la mejor manera resiliente a afrontar cualquier adversidad, ya sea de desastres naturales u originados por el hombre. En ocasiones, las circunstancias difíciles de la vida o los traumas nos permiten potenciar recursos personales que se encontraban latentes y que el individuo desconocía hasta el momento.

Es preciso visualizar a la salud mental como un fenómeno complejo determinado por múltiples factores sociales, ambientales, biológicos y psicológicos. Son muchos los factores que intervienen en situaciones de riesgo, como en el tema que nos ocupa: Por ejemplo: Situaciones trágicas y desastres, contagio, epidemias, pandemias, terremotos, maremotos, bioterrorismo y pánico en general, presentándose incluso en la población algunos cuadros clínicos de psicosis, paranoia, trastornos de ansiedad generalizada, también pérdidas en su economía, crisis por saturación mental, implotación, miedos, dudas, inseguridad, emociones abrumadoras y hasta culpas por duelos no vividos o duelos demasiado prolongados, que generan en el individuo conductas desadaptativas, depresiones severas y pensamientos distorsionados, sobre todo por el actual confinamiento que es parte del protocolo sanitario de las Secretarías de Salubridad de los gobiernos como parte de las medidas preventivas y protección civil, ese "Quédate en casa" que puede salvar vidas, pero que demasiado encierro prolongado puede llevar a alterar la salud mental de los individuos.

Sin embargo, también es digno reconocer que en situaciones de desastre, no todas las personas suelen reaccionar igual; algunas sufren de mayor impacto psicológico, son particularmente más susceptibles que otras. Este fenómeno se da principalmente en los niños y los ancianos. Los niños por ejemplo, es muy común que no tengan la capacidad para comprender y racionalizar eventos traumáticos, repercutiendo en cambios bruscos de su conducta, agresividad, frecuentes expresiones hostiles, impulsividad, y hasta bajas en el rendimiento escolar. Y por otra parte, algunos ancianos con problemas de salud física y mental, pierden a veces sus sistemas de apoyo social, se vuelven vulnerables al no tener independencia económica ni autonomía para obtener los recursos que les permita sentirse sanos y seguros adquiriendo oportunamente sus medicamentos.

La conducta del individuo:

Varía de acuerdo a sus recursos personales, sus circunstancias de vida, y está relacionada además, con su genética y ambiente. Factores como la edad, el entorno, la situación económica, antecedentes de salud mental y la magnitud de pérdidas sufridas a lo largo de su existencia o en situaciones de desastre, como la que se atraviesa en los tiempos actuales: El azote de la pandemia de COVID-19, desestabilizan emocionalmente al más vulnerable. Afortunadamente la conducta es modificable, y un punto de referencia óptimo, sería que el individuo en tiempos de crisis, aprendiera a desarrollar una cultura de prevención y apertura de conciencia desarrollar su propio Proyecto Moral, descubriendo sus valores a través de métodos deliberativos, herramientas y técnicas muy generosas de intervención psicoterapéutica, que les permita reflejar su realidad y el tipo de problemas emocionales y de conducta que sufren, y además, recuperen la confianza en su propia capacidad y esperanza.

En situaciones trágicas como la pandemia por COVID-19 que están atravesando todos los países del mundo, la salud mental se tambalea ante las inclemencias del alto riesgo, el tiempo, la falta de vacunas para detener el coronavirus, porque no existen y la vulnerabilidad del ser humano ante el esparcimiento del virus, el contagio acelerado, la escasez de insumos, la falta de recursos médicos y medicamentos e infraestructura hospitalaria, la falta de organización, la cultura, los sistemas de creencias, el hambre, el miedo, la duda, la culpa, la ansiedad, la depresión... ¡El caos!

¿Qué hacer ante el riesgo de perder la salud mental?

Afortunadamente se cuenta con programas informativos de prevención, guías de orientación para los profesionales de la salud, apoyos de salud pública y privada en las distintas latitudes de nuestro planeta tierra para atender las emergencias sanitarias, apoyos que no sólo consisten en atención médica sino también psicológica. Las terapias breves y de emergencia las puede recibir cualquier persona necesitada con solo solicitarlo ¿Necesitas orientación gratuita? estamos a tus ordenes, escríbenos a psico.mx o contacta con los psicólogos más cercanos en tu comunidad, estamos para servirte y recuerda aquella máxima que dice: Quien no valora la vida, no merece vivir.

Por favor "Quédate en Casa", y cuida a los tuyos, ¿Si?.

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Escrito por

Dora Lidia Pérez Rochín

La Psic. Dora Lidia Pérez Rochín es una de las psicólogas más profesionales que brinda la atención y orientación necesaria para poder resolver sus problemas emocionales que pueden estar afectando su vida social y familiar. Cuenta con el conocimiento y la experiencia necesaria.

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