El autosabotaje, una manera de ocultar nuestra inseguridad

"Las personas no son recordadas por su número de fracasos, sino por el número de veces que tuvieron éxito". Thomas Alba Edison

El autosabotaje hace que determinadas actividades y proyectos que son muy importantes no se lleven a cabo a pesar de los deseos e intenciones de realizarlos.

Si en la infancia recibimos diversas opiniones que son negativas por figuras que son representativas y significativas éstas nos marcan al ser repetidas como por ejemplo uno de nuestros padres nos puede estar diciendo de niño al no llevar a cabo ciertas tareas encomendadas: ¡tú eres muy perezoso nadie te va a querer en la vida! Y en la vida adulta cuando queremos relacionarnos con una persona que pensamos podría ser el amor de nuestra vida, nos decimos a nosotros mismos: "¡no me va a querer porque yo no soy lo suficientemente inteligente para tener una pareja así!"

Estas opiniones, actitudes negativas devaluatorias hacia nuestra persona tiene que ver desde nuestro inconsciente llevándolas hasta nuestra vida adulta representándose a través de comportamientos de procrastinación retrasando las actividades a realizar, dejándolas para después, o responsabilidades que son importantes iniciándolas para luego dejar a medias como: proyectos, relaciones, entrevistas de trabajo, etc.

Crecemos adoptando de forma profunda en nuestro inconsciente adoptando un patrón de pensamientos negativos hacia nuestra persona.

Estas actitudes no necesariamente tienen que ser verbalizadas para influir y marcar al niño. Un padre ausente puede dejar a los niños desde su tierna infancia marcados dejando una sensación de inseguridad pensando que hay algo equivocado en ellos.

Al producirse un cambio importante en nuestra vida, el autosabotaje tiene como finalidad mantenernos en una zona de confort para tener un control, aparentemente ordenado. Sin embargo, lo que existe es un temor al cambio que nos lleva a no tomar decisiones por miedo al compromiso y aseguramos de no llevar a cabo actividades que representan una modificación en nuestra rutina o nuestros planes. Evitamos el posible fracaso en la inactividad. En el fondo, también, hay una búsqueda de aceptación porque no nos sentimos seguros de nada, sufrimos de baja autoestima.

Esta voz crítica interior acuñada por Lisa Firestone, refiere que es como cuando respondíamos a nuestros padres en nuestra niñez, la cual queda grabada en nuestra mente, y que tiene como finalidad mantener una forma de alerta para no repetir errores, sin embargo, ya no funciona.

Las actitudes más frecuentes ante el autosabotaje son:

• No realizar las cosas de principio a fin. Empezar con mucho ánimo las cosas y dejarlo a medias.
• La procrastinación. Posponer para después lo importante a realizar.
• El perfeccionismo. Lo perfecto no existe, las cosas pueden ser mejoradas, pero en los pensamientos de perfección nada podrá ser perfecto y se piensa mejor no llevarlo a cabo.
• No cumplir las promesas. No existe un compromiso.
• Futurizar. Recrear en nuestra mente actividades con fracasos de un futuro desconocido y angustiante.
• Baja estima. No puedo decir "no" porque debo agradar y ser aceptado. No merezco ningún éxito.

"No temas arriesgarte, el peor enemigo no se encuentra afuera, sino que habita dentro de ti"

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