Alcoholismo: a propósito de Leaving Las Vegas

El alcoholismo ha sido un tema recurrente en la historia de la cinematografía. No podemos dejar de mencionar la magnífica Días sin huella (Billy Wilder, 1945), o la indispensable Días de vino y rosas (Blake Edwars, 1962), o más recientemente el filme titulado 28 días (Betty Thomas, 200), o bien, Factótum (Bent Hamer, 2005), entre muchas otras.

Pero a nuestro parecer, existe una película que ha reflejado fielmente la caída en el mundo de alcoholismo de manera cruda y realista, Leaving Las Vegas.

La película

Leaving Las Vegas (Mike Figgis, Estados Unidos) irrumpió en nuestras pantallas en el año de 1995. Basada en la novela homónima del escritor John O'Brien, relata la historia de Ben Sanderson (un inmenso Nicolas Cage), quien al ser despedido de su trabajo, haber sido abandonado por su esposa, y estar fuertemente endeudado, decide dejarse morir ingiriendo alcohol.

Son diversas las causas que llevan a una persona a caer en esta enfermedad, por ejemplo, en algunos casos por predisposición genética, a causa de crecer en un hogar desestructurado, incluso también por socializar. En el caso de la película que nos ocupa, la razón fundamental por la que este hombre cae en el alcoholismo es por una clara evasión a problemas personales y profesionales que lo han conducido hacia una fuerte depresión que no tiene ganas de superar.

El personaje principal aunque ha tomado la decisión de suicidarse lentamente con bebidas alcohólicas, atraviesa por una serie de situaciones de riesgo que, generalmente, a los alcohólicos se les van de las manos. Por ejemplo, durante la película se ve involucrado en numerosas peleas, esto se puede explicar porque el alcohol desinhibe a las personas y en el caso de Ben, lo hacía decir comentarios impropios en diversas situaciones que molestaban a la gente de su alrededor y entonces era agredido por éstas.

Además de ser un problema personal, el alcoholismo también afecta a familiares y conocidos del adicto. Aunque en este caso concreto conocemos al personaje de Ben e solitario, pronto contrata los servicios de una prostituta, Sera, que termina enamorándose, o bien, enganchándose de él. Es aquí cuando se muestra la codependencia que provoca el sentirse al cuidado de una persona que sufre este padecimiento.

La mujer lo cuida desde que lo conoce y se encarga que, dentro de lo posible, se encuentre bien, aunque conoce a la perfección las intenciones que tiene Ben de suicidarse.

Y al final... (spoiler)

Somos testigos de deterioro sufrido por el personaje principal desde que toma la decisión de matarse hasta el final de sus días. Incluso cuando la vida le da una nueva oportunidad en el amor, cuando conoce a Sera y se enamoran, Ben tiene muy bien definido su objetivo y, finalmente, lo consigue y muere.

Esta película nos muestra las consecuencias más desesperanzadoras que tiene este padecimiento, aunque creemos que solo una pequeña parte de las personas alcohólicas tiene un fin tan terrible y desolador.

Si tienes un familiar o un conocido que sufra de alcoholismo no dudes en apoyarlo y aconsejarle que acuda al Centro de Alcohólicos Anónimos más cercano, o bien, que pida ayuda a un psicólogo especializado en adicciones para que pueda ayudarlo a superar esta condición.

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