4 pasos para superar el cansancio emocional

Todos pasamos por fases estresantes, algunas más otras menos. Sin embargo, cuando este período de estrés en la vida personal o en el trabajo se alarga, el individuo puede desarrollar un cansancio emocional que muchas veces compromete la calidad de su salud física y mental. 

El cansancio emocional es un agotamiento de la mente donde la persona siente una fatiga generalizada que perjudica todas las esferas de su vida. Este tipo de cansancio suele venir asociado a un sentimiento de incapacidad para realizar las tareas del día a día, lo que causa mucha angustia, pudiendo incluso llevar a la depresión. Esto puede tener un impacto significativo en el día a día, en el comportamiento del individuo y en las relaciones personales. 

Las causas del cansancio emocional

Vivimos en una época en la cual el tiempo para la pausa, el ócio y la contemplación son cada vez más escasos. Por otro lado, la sociedad altamente competitiva a menudo nos obliga a buscar una vida perfecta que en realidad no existe. Esto nos lleva a estar cada vez más agotados.

Según los psicólogos, el agotamiento emocional normalmente ocurre en quien se exige demasiado a si mismo y suele manifestarse después de un período de estrés prolongado.

El cansancio emocional puede ser desencadenado por:

• Cambio significativo en la vida como, por ejemplo, un divorcio
• La muerte de un ser querido
• El nacimiento de un hijo
• Una enfermedad crónica
• Un ambiente de trabajo con alta tensión
• La pérdida del empleo
• Problemas financieros

Síntomas del cansancio emocional

Personas que sufren de cansancio emocional sienten que tienen una total falta de control de lo que les sucede y no consiguen equilibrar el cuidado personal con las otras demandas de la vida. Los principales síntomas del agotamiento emocional son:

Cambio en el estado de ánimo. Poco a poco, la persona empieza a notar que está más pesimista y que ha perdido la motivación para trabajar, realizar tareas sencillas o socializar. Hace todo en el piloto automático. Además, se puede sentir:

• irritabilidad
• ansiedad
• apatía
• pesimismo
• falta de esperanza y de motivación
• tristeza

Dificultad para raciocinar. El agotamiento emocional perjudica el buen funcionamiento del cerebro causando:

• fallos de memoria
• dificultad de concentración
• falta de imaginación
• confusión mental
• dificultad de planeamiento y organización

Problemas de sueño. Las personas con agotamiento emocional pueden tener insomnio, pasando la noche en blanco y estando muy cansadas durante el día. En algunos casos, el individuo tiene mucho sueño. El bajo estado de ánimo puede dificultar salir de la cama por la mañana. 

Cansancio físico. El cansancio emocional también se manifiesta físicamente a través de:

• cambios en el apetito
• problemas digestivos
• pérdida o aumento de peso
• dolor de cabeza 

Además, quien sufre de agotamiento emocional suele tener la autoestima más baja y no se entusiasma con nada tanto en la vida personal cuanto en el trabajo.  

Cómo superar el cansancio emocional

Para superar el agotamiento emocional es importante hacer un cambio en el estilo de vida. El primer paso es detectar la principal fuente de estrés. Por ejemplo, si el problema está en el trabajo, tal vez sea el momento de buscar otro puesto que sea más adecuado a tu bienestar. Además, es importante:

1. Buscar mantener un estilo de vida sano

Tener una vida saludable, aumenta la resiliencia y mejora la salud física y mental. Mantenga una dieta equilibrada, rica en frutas y verduras, haz deporte, evita fumar  y establezca una rutina de sueño que te permita dormir de 7 a 9 horas cada noche. Son cambios sencillos, pero que harán una enorme diferencia en tu bienestar.

2. Equilibra la vida personal con la laboral

No permitas que el trabajo o el cuidado de un ser querido tome todo tu tiempo. Asegúrate de planificar las vacaciones y los descansos semanales. También es aconsejable mantener pausas diarias regulares para relajar un poco la mente. En estos períodos puedes escuchar una música, ir a tomar un café con un amigo o meditar algunos minutos. 

3. Socializa con otras personas

Pasar un rato con amigos o familiares es una buena manera de desconectarse de los problemas y cargar las energías. Busca no aislarte de los demás. Comparte, llora y disfruta de la vida con tus amigos. Al final, esto es lo que queda. 

4. Cambia la actitud

Intenta sustituir los pensamientos negativos por los positivos. Enfoca en metas realistas e evita compararte con los demás. Busca vivir el momento presente. No se culpe por el pasado ni tampoco intenta anticipar el futuro. A menudo un cambio en la actitud puede cambiar toda una vida. 

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